La ciudad de Buenos Aires ha quedado desdibujada tras una cortina de humo. El nubarrón, un tanto toxico (el valor del monóxido de carbono en el aire alcanzó un nivel de 15,3 partes por millón PPM), proviene de la quema de pastizales en campos ubicados en la afueras de la ciudad.Mientras tanto, llegar o salir de la metrópolis porteña se ha tornado una neta misión imposible. La estación de Retiro, Aeroparque y algunas estaciones de subtes, han sido cerradas a causa de la rabieta humeante. Por el mismo motivo el gobierno nacional decidió cerrar las rutas 8 y9 , como así tambien algunas autopistas que permiten el ingreso y salida de la ciudad.
Por otra parte, el estado responsabilizó a los productores agropecuarios por esta continencia. Avivando el fuego (nunca fue más valedera esta metáfora) desde el gobierno se lanzó una denuncia penal contra 160 propieatrios y arrenadatarios de los campos donde se prodecen los incendios, ya que se considera que al humareda es producto de la quema irracional de los productores, a los fines de disminuir costos e incrementar la rentabilidad.
Parece que este será el nuevo episodio del conflicto agropecuario. Mientras tanto Buenos Aires quedará aislada y respirando muy malos aires.
*Saludos a mi amiga laboral que se quedo sin visitar a su noviecillo porteño!!!
